Despedida y cierre es el mensaje con que toda cadena de televisión, que se precie, anuncia tradicionalmente el final de la emisión de la programación diaria.
En el caso que nos ocupa he decidido invertir el orden de los términos lo que, contradiciendo la conocida regla matemática, en este caso sí que altera el producto.
Me explicaré.
Lo de hoy no es una Despedida y Cierre a la usanza tradicional, en la que al día siguiente uno regresa con nuevos contenidos y con historias que contar a los amigos. No, señores y señoritas. En este caso el
Cierre es impuesto como definitivo y la
Despedida un imperativo administrativo por el que el Tubbo cierra su emisión en Blogalia y se traslada a Blogspot.
Resulta que para los gestores de Blogalia el Tubbo es un desconocido y en Blogalia solamente tienen cabida los amigos del administrador. La conclusión es obvia. El Tubo no hace amigos de conveniencia y dado que, por ser de carácter libertario no quiere identificarse, ha sido declarado sin papeles en esta casa, se larga como vino: por la puerta de atrás y sin meter ruido.
El haber visto como se me privaba de la clave de acceso al blog durante una semana (lo que francamente me ha mosqueado un tubo) y el haber leído la declaración de non gratitud por parte del administrador de Blogalia constituye una razón de peso para decidir recoger mis rollos de papel, el resto de mis bártulos higiénicos y emprender una nueva etapa en
http://Tubbo.blogspot.com
Había una vez un amable y gangoso cerdito que, cada vez que terminaba su función, se despedía con un:
"
Esto, esto es to-to-todo amigos".
Desgraciadamente, ha llegado el momento de que un modesto servidor deba hacer suya tan afamada despedida.
El motivo real es lo de menos. Ya apenas importa cual haya sido la verdadera motivación para que se me considere como papel de deshecho al que se tira por el sumidero del retrete.
Debo confesar que
de Post en Post he ido tomando cariño al huequito en el que había asentado mis posaderas; un espacio que paulatinamente había ido creciendo en visitas (964 según mi Nedstat) y que ahora languidece víctima de la inactividad impuesta por el cierre preventivo. Sinceramente lo siento. Siento no caer bien a los
capullos y que esto me haga perder la posibilidad de expresar libremente mis ideas. Pero un servidor es así y no creo que a estas horas esté para aceptar demasiados cambios.
Espero sinceramente, de quienes me han venido leyendo, que sepan disculpar esta carencia de mi carácter, que me impulsa a enfentarme al poder sea cual sea la forma desde la que pretenda establecer sus imposiciones, y que asuman el desplazamiento a mi nueva morada, en la que no ahorraremos diversión.
Bien. El caso es que no pretendo que este último post en Blogalia sea otra cosa más que el aviso para navegantes de la Crónica de un Cierre anunciado. No le busquen más vueltas al mismo. Ya saben que todo es producto de su mente. Sencillamente, un servidor de ustedes no reúne los requisitos necesarios para que le otorguen la categoría de ciudadano blogalita y, expulsado por paria y por sin papeles, debo partir hacia un nuevo antro en el que dar una patada en la puerta y "Okupar" alguna de sus habitaciones; un lugar desde el que seguir desbarrando contra todo aquél que haga méritos suficientes para merecer una buena restregada de papel higiénico.
Antes de partir, quiero agradecer las muestras de cariño y apoyo que he recibido estos días; una solidaridad proveniente de 27 nuevos amigos que por inexperada y oportuna nunca podré agradecer lo suficiente. Para todos ellos, por haber estado ahí preocupándose de lo que acontecía mi más sincero agradecimiento y la promesa de seguir dando el Tubo mientras quede cuerda para ello.
Por último, para todos esos personajillos, que me han hecho llegar sus anónimos insultos a través del comentario de algún post o en cada uno de esos cuatro e-mails que conservaré como oro en paño de la intolerancia, solamente decirles que yo también les aprecio por lo menos tanto como ellos a mí y que aprovecho esta oportunidad de mi despedida de Blogalia para decirles:
¡Yo en la vuestra mucho más!